Por: Federico Rodríguez de Rivera
El socialismo jugó un poco durante estos años a hacernos creer que todo era cuestión de ilusión y fe en su líder. Era clave negar los problemas para afrontarlos... como cerrar los ojos y no ver, abrir los ojos y no ver. Pero la realidad es cabezona.
Negaron la crisis y la crisis llegó. Negaron los conflictos autonómicos y llegaron los gobiernos insolidarios con presidentes autonómicos socialistas. Negaron el trasvase y la "campana" del chaparrón a final de año les trajo agua y les mató las excusas de la "transferencia de recursos a Cataluña". Negaron la libertad de los padres a educar a sus hijos y más de 50.000 objetores como héroes de la libertad se levantaron en toda España. Y es que hay dos escenarios: la realidad que vemos y palpamos todos. Y el escenario "oficial" donde no pasa nada, donde los sindicatos se comportan como ovejas bien agradecidas, donde los ERE´S no mueven ni una línea de tinta para preguntar sobre si ¿hay alguien diseñando una política económica?, donde la violencia doméstica se ha multiplicado a pesar de las leyes, donde esa violencia ha abundado más en los "modelos de unión, que no de familia" que este gobierno sin norte ha querido poner a pié de igualdad del matrimonio. Ha sido un año más de gobierno "hacia la ideología", no hacia el bienestar; donde lo importante es que las lesbianas adopten, no que los padres tengan la alternativa al aborto fomentado; donde se ha hecho negocio de la muerte y donde socialistas y comunistas se han alineado con las Clínicas abortistas, con los médicos corruptos que no pagan al fisco, con los fuertes... en vez de con los no nacidos. Un año donde los socialistas han trabajado en la implantación de su iluminado progresismo, de su sectarismo para acaparar y acallar las voces independientes en los distintos sistemas administrativos, donde la "división de poderes" es una línea insignificante y donde los políticos, sobre todo los socialistas, no tienen credibilidad, prestigio ni presunción de defensa del interés público. Un año de pesebre para actores y directores con "encargo" de películas corrosivas contra la vida, la familia, y las instituciones de la Iglesia... donde ni se ha respetado a los familiares de personas caricaturizas en películas "anti"... que no han tenido calidad como, sin embargo, "Bella" que ha sido taquillera contra las críticas "oficiales" de sectores del "pensamiento único". Un año con múltiples ataques a la libertad... y con un balance positivo: estamos, permanecemos, crecemos y tenemos más razones para defender la libertad. No esperamos que Zapatero cambie, no le vemos capaz de tener sentir democrático y dejar de querer imponer su ideología, pero sí esperamos que todos nosotros sigamos haciendo la "ola" de la libertad y de su defensa, aunque tengamos que acuñar un nuevo concepto de cultura, no subvencionada, de calidad y con el frescor de lo nuevo, de lo libre, de lo auténtico... Ahí estaremos: con la familia, la libertad, la independencia... y gracias a Zapatero que ha logrado que nos unamos todos los amantes de la libertad... que somos un buen puñado. frid