domingo, junio 12

Normalidad democrática

 
Había escrito que no se recuperaría la normalidad democrática hasta que el PP gobernase algún municipio en Cataluña. Badalona, principalmente, ha sido una realidad.
Y es que Rodríguez Zapatero, de nefasta memoria, había subvertido el orden democrático con su propuesta de eliminar al PP de todas las instituciones. Y los demás partidos, ¡cobardes!, se plegaron a su oportunismo. España se despertó el 22-M más liberal de lo que se esperaban ocho años de acoso y derribo a un partido democrático.
El fantasma del fascismo se arrojó contra la derecha moderada, y se la denominó "derecha extrema" procurando echarle el "sanbenito" de antidemocrática. Esa gran mentira urdida en las cuevas de Ferraz, con Zapatero como principal responsable, intentaba que alguien saltase en legítima defensa y tener la excusa para crear una inmensa bola de nieve: su intento fracasó ante la infinita paciencia de los demócratas que han resistido y han visto que la crisis ha sido el único fruto de esa política. Bueno, más que la crisis, la cerrazón para no verla.
Hoy el PP, en los ayuntamientos de España, pacta, y pacta con PNV, con CiU, con PAR, con CC, con IU, con CHA, incluso con el PSOE y ha logrado el mayor éxito político hasta la fecha. El PP ha recibido la confianza de la ciudadanía para que nos saquen de la crisis, para que compaginen la política social con las medidas de austeridad y con nuevos aires de libertad.
El PP está en condiciones de hacer pactos de Estado, lo que no pueden hacer aquellos que priorizan el sectarismo.
El PSOE debe refundirse hacia el centro izquierda, porque incluso lU ha mostrado un talante más democrático que ellos en muchos sitios, como en Extremadura donde han propiciado un cambio.
España hereda el regalo envenenado de Bildu, del que son responsables los socialistas actuales y que muestra la necesidad de cambiar los criterios en los altos tribunales: Constitucional y Supremo, para primar la sensated a la filiación política.
Confío que quienes se han dado cuenta que la política de acoso y derribo a una fuerza democrática deben ser castigados, les sigan castigando para que un PP votado por los suyos y los centrados de "los otros" haga una reforma en profundidad, una segunda transición hacia la concordia y un gobierno para todos.
Recuerdo que todavía no hemos puesto la última piedra, que quedan unas elecciones y muchos meses para preparar ese cambio, un cambio que no se hará en la calle con la autogestión poética de unos "muy pocos" indignados, sino por el voto responsable y consciente de una multitud de "verdaderos" indignados, que son los que aplican su indignación en el juego democrático.
En las Elecciones Generales os espero.
frid


--
Aragón Liberal
Periódico digital de información y Opinión



2 comentarios:

Leona catalana dijo...

Lo siento, frid, pero no te has enterado de nada.

Xavier García Albiol, nuevo alcalde de Badalona, lo ha conseguido por robar el programa de mi partido, la Plataforma per Catalunya.

Pronto los badalonenses -y tú mismo- verán que se han caído con todo el equipo y no ha sido más que un engaño.

García Albiol, como su jefa, Alicia Sánchez-Camcho, ya se dieron cuenta en las autonómicas de que qne nostros arrasabámos, como así ha sido, a pesar de ser un partido nuevo, sin representación parlamentaria.

Por favor, no te jactes de un ladrón que, por supuesto, no va a cumplir sus promesas.

cartapacio.liberal dijo...

Leona: lo que comento en el artículo no es la maravilla del candidato, sino que ese candidato haya podido ser alcalde aún siendo del PP, lo que es importante para la normalidad democrática.