jueves, octubre 19

Honrar a las víctimas del terrorismo.

image¿Qué podemos devolver a las víctimas del terrorismo? ¿El recuerdo? No es suficiente. Les debemos la honra; y la honra implica fidelidad a los valores democráticos por los que murieron. Uno de ellos es la lealtad a la Constitución de la Concordia.

Honrar a las víctimas del terrorismo.

Algunos amigos me han invitado a un debate sobre el bien común, y claro, he planteado algunas preguntas sobre qué se entiende hoy en día como bien común. Entiendo que si tenemos una tarta, procuremos repartirla para que todos tenga su parte proporcional, según sus necesidades. También entiendo que el bien común lleva a planear una obra pública y pagar las expropiaciones de modo justo para compensar el daño producido. Después todos podrán beneficiarse de mayor o menor grado de esas infraestructuras que fomentan nuevas oportunidades y riquezas, de las cuales uan parte revierte a toda la comunidad a través de servicios, de bienes y de impuestos. Pero todos pueden ganar en el reparto de bienes materiales para los vivos.

Pero cuando uno da su vida por la nación, o por la Patria, ¿qué le revierte a él del bien común? Esa persona ya no podrá en esta tierra gozar de nada. Sus amigos y familiares podrán acostumbrarse, pero nadie sustituirá su presencia. Esa persona es irrepetible. Y ¿cómo le puede pagar la Comunidad para la que ha hecho el máximo sacrificio?

No sirve decir que esa persona es creyente, que tiene fe en la vida eterna y que allí recibirá el pago definitivo. Esa actitud es válida en la esfera de la persona y Dios, pero no sirve para la relación entre esa persona y la comunidad de la que formó parte.

Sólo cabe ante el héroe, y son héroes todos los muertos por la democracia, todas las víctimas del terrorismo de ETA, el recuerdo y el honor de los vivos, y en especial de los más altos representantes de la Nación. Bien dice Rodríguez Zapatero, si no fuesen sólo palabras bonitas: "que los tendrá siempre en su recuerdo". Pero el recuerdo del político es efímero y es, muchas veces, como las lágrimas del cocodrilo.

Los americanos tienen el "Memorial Day" para recordar a los que dieron su vida por la Patria, además de cuidar con especial esmero los cementerios de guerra. Sus héroes son héroes para todos y, por ellos, mantienen el orgullo de ser americanos y, para ellos, además de tributarles el honor debido, defienden con ahinco los valores por los que sus héroes murieron.

Nosotros nos debemos a los héroes de la democracia. Murieron por España y no podemos traicionarla, más aún cuando son héroes de la concordia y no del resentimiento, son héroes de todos los españoles y no de una facción política.

No sirve recordarles arrebatándoles el honor, que eso significaría despojar a España de los valores de concordia, unidad, libertad y demás principios que emanan de nuestra Constitución de la concordia.

Nuestra respuesta, el único bien que les podemos dar a nuestros muertos por España, nuestras víctimas del terrorismo, es el bien del honor, en el que está implícito el recuerdo.

frid

3 comentarios:

Mireia dijo...

pero, ¿de que le sirve el recuerdo a un muerto?
Podemos honrarles impidiendo que otras personas pasen por su mismo sufrimiento...
Nunca podremos saber lo que pensarian.

frid dijo...

Cierto, miau, no sabemos cómo pensarían; y también tenemos que impedir que otros mueran... pero para eso no podemos entregarnos a los verdugos (moriremos todos) y, desde la razón, se nos dice que hay una virtud humana, la piedad, que lleva a venerar a los que nos dieron la vida (los padres, aún difuntos) y los que perdieron la vida por nosotros.
La razón también nos dice que el alma es inmortal. Y, si nos ven los muertos (como pensaban también los paganos griegos), nuestra honra es incienso que sube a su morada.
Si no llegamos a conocer, por debilidad de nuestra razón, la inmortalidad del alma, al menos mantengamos vivo el recuerdo de las víctimas.

vitio dijo...

Pues a las víctimas les debemos casi todo. Muchas han sido un referente de lucha (Miguel Ángel Blanco, Gregorio Ordoñez o Fernando Buesa)por la libertad.
Por todo eso, les debemos un "gracias".
Un saludo.