domingo, julio 8

El mito del azar y la tiranía consiguiente

Nuestros laicistas con tal de eliminar a Dios como explicación tanto del principio de la creación como de su desarrollo, han encontrado una panacea, el AZAR. Un azar inteligente que ha logrado llevarnos por el camino del progreso.

Para ellos hay una "materia primigenia", informe y eterna... que está sin ninguna explicación, porque sí. Y no se sonrojan al pensar en ello. Es maravilloso el mundo actual, también lo sería en el estado "magmático" o en ese "botón de energía infinita", pero ¿y antes? Niegan que sigamos en el análisis del porqué y se empeñan en que pensemos sólo en el cómo funcionan las cosas.

Y, ¿cómo funcionan? Un relojero tendría la respuesta antes que esos progresistas soñadores. Para el relojero las piezas están dispuestas como un mecanismo perfecto, sin retrasos, sin imprevisiones, y da la ¡hora! y la da todos los días con el amanecer y el atardecer.

Para estos señores el azar es algo incuestionable, pero un azar que "curiosamente" asciende hacia la perfección del ser y que camina hacia ese superhombre que intentan con toda esa "genética hominicida", un superhombre sin conciencia moral, más inteligente y más saludable, instrumento sin espíritu crítico al servicio del Estado... ¿y después? Se acabó el progreso, ya están ellos para evitarlo.

Pero ese azar choca contra el canto del pájaro al amanecer... todos los días, contra la siesta del león al mediodía, todos los días; contra el amanecer, la llegada del verano, el ciclo lunar, la órbita planetaria... todos los días. ¡Qué azar tan monótono en sus repeticiones sucesivas!

Y niegan que haya providencia, que un creador haya creado a los seres y a las leyes que los rigen... pero siguen en su azarosa vida las leyes fijas de la vida. Hacen leyes en Boletines de papel o informático, incorporan policía estatal para controlar que todos cumplan esas leyes, y un sistema judicial incuestionable. Porque no pueden permitir el azar en la vida ordinaria.

El azar es mera escusa para negar a Dios y sustituir una ley que nos deja infinitos grados de libertad por una ley humana, creada por los negadores de Dios, que sólo nos deja la opción de pensar como ellos y la libertad de liarnos sexualmente con humanos y animales.

¿Azar? No son consecuentes. Les diría que si yo creyese en el azar esperaría con admiración todos los días, primero si me despierto como ser humano u otra cosa, y si está ahí la ventana o un muro... y si al mirar por la ventana me encuentro en la tierra que conozco o en el País de las Maravillas. País de las maravillas... no es ese el país de Alicia, ese tan maravilloso e inexistente que nos vende todos los días Zapatero.

Los muchachos del azar hablan de sueños, de mundos idílicos al tiempo que en el día al día hacen las leyes que nos tiranizan.

frid

3 comentarios:

jovialiste dijo...

Azar o no azar, de todos modos la mente del hombre no puede saberlo, por ello es que hace falta otra cosa que es el creer, la fe, a la que da como necesaria la religión.
Pero los racionalistas apelan a lo irracional o sea al azar como una posible explicación y se basan en la teoría de las probabilidades, que en los grandes números, te dan cierta certeza humana.

Anónimo dijo...

no creo que la idea de azar contradiga a la de dios. si hablamos de azar epistemologico nos referimos a todo aquello que se le escapa la percepcion humana, ya sea por su complejidad, por error o por incapacidad propia del individuo. si hablamos de azar ontologico, versamos sobre aquello que es propio del devenir de la cosa, sin la posibilidad de controlarla por parte de los humanos, osea todo aquello que se nos escapa por ser inasible.. si decimos Dios acaso no nos referimos a un concepto que trata de significar el mito del origen de la creacion del creador. el cosmos es una gran cocina donde estan todos los condimentos y las recetas de la creacion, y es en el constante devenir en donde es creada la cosa misma.la cosa para nosotros es la vida en este planeta, nuestros niños, nuestras plantas, nuestra salud; a ver si nos dejamos de joder de una vez por todas con las diferencias y nos avocamos al verdadero dios nuestra madre tierra, la casa del ser humano. Ismael M. R.

rasputinsky dijo...

Haces de tu casa un Dios, trasladas a la concha del caracol la caracolidez, al vestido la humanidad, a la tierra "inerte" la vida "latente". Un poco caótico ese anónimo que cree en la "madre tierra" y que volverá a ella como polvo post-gusanos comedores. No señor. Lo "irracional" es y será siempre irracional, aunque seas un típico ejemplo de "pensador imaginativo", o lo que es lo mismo "no pienses" sino imagines. No estamos en el mundo del "yo creo" sino en el mundo real, que aprendo con mi limitación pero realmente. Y sé que lo racional es muy superior a todo el determinismo de "esa madre tierra" que dices que "piensa" con el azar.