sábado, noviembre 1

Yo también soy de la Universidad de Navarra



Podría no serlo, podría haber estudiado en otro lado, pero tengo la suerte de que una parte de mi vida universitaria pasase en esa Universidad.

Si no hubiese pasado por ella, conociendo la enseñanza del hoy San Josemaría Escrivá, habrá admirado su espíritu universitario y su amor a la verdadera sabiduría.

Tantos atentados a esa Universidad son como atentados al Saber, al espíritu universitario. Y es que el Terrorismo, el Fundamentalismo, el Sectarismo... no soportan la Verdad, ni su búsqueda. Y por eso para esos sistemas una fuente de saber, de independencia intelectual, de libertad, son un peligro. Sólo prosperan si se apaga la luz de la inteligencia... y lo intentan con bombas.

¿Acaso los asesinos de ETA podrán algo contra la luz de la inteligencia? No, pero pueden hacer daño. Esta vez han asustado a familias que, valerosas y sacrificadas, envían a sus hijos a esa Universidad que les cuesta dinero y son familias modestas, como la mía.

Y eso es el tesoro de la Universalidad: "los sacrificios que padres, alumnos, profesores y amigos y personal de la propia universidad hacen para sacarla adelante"

Y esos sacrificios, hechos cara a Dios ¡son tan poderosos!

Decía mi amiga Remedios que la Virgen del Amor Hermoso ha cuidado de esos jóvenes, también se ha notado la sombra de San Josemaría, el manto protector de los Ángeles y la sonrisa divina.

Mi afecto está con ellos.

1 comentario:

Sand Storm dijo...

Desde luego hay que dar gracias a Dios por que ha sido un verdadero milagro que no haya habido mas que heridos.
Es increible como alguien puede defender una causa que se sustenta en el asesinato y el terror. Desde esta pequeña ventana mi ¡NO! mas rotundo a ETA y su gente.

Jaime Arenas