lunes, julio 18

Algo debería cambiar en Aragón

El otro día leí con asombro que el Gobierno de Luisa Fernanda Rudi planteaba ser una continuidad del anterior, sin grandes cambios. Entiendo que eso es una medida de prudencia: los cambios deben ser paulatinos, y no se puede entrar como un elefante en una chatarrería, pero... ¿no ha sido el modo de gobierno anterior el que nos ha llevado a la bancarrota a todos los españoles? ¿No son los Ayuntamientos y las Comunidades Autónomas responsables importantes del déficit que arrastra España?



Ciertamente la prudencia lleva a hacer auditorías previas que justifiquen los cambios de política del gobierno popular en Aragón, pero también la prudencia lleva a pensar que el modelo que nos arruinó no es buen modelo.



Cuando vemos el museo de arte moderno de Zaragoza, con una desviación del gasto de más de 15 millones de euros, cuando vemos los edificios de la Expo desmantelados, cuando los grandes eventos son una losa para más de la mitad de la ciudadanía de Aragón, cuando hay Comarcas más pequeñas que pueblos diminutos, cuando el gasto social no es proporcional a los ingresos y cuando se ha derrochado tanto como si fuésemos ricos, con el endeudamiento de todos los españoles, algo debe de cambiar.




Bien habla la Presidenta de que es un servicio público la "enseñanza concertada", pero también es un servicio público "toda enseñanza" aunque la paguemos de nuestros bolsillos, como lo es la atención familiar a los mayores y disminuidos, que ahorra al Estado gastos considerables. Es claro que algo ha de cambiar de modo paulatino, pero de modo claro para que entendamos de una vez que el servicio público es el servicio al ciudadano, no el servicio exclusivo de los entes de gobierno del Estado o de la Autonomía.



Algo ha de cambiar si queremos que Aragón, una Autonomía infra-habitada, sea competitiva. Y algo tiene que ver eso con una política familiar abierta a la vida. Algo ha de cambiar si queremos que Aragón no sufra la macrocefalia zaragozana, sin poner la zancadilla a los municipios del entorno de Zaragoza, que llegan prácticamente hasta Huesca.



Es claro que el modelo socializante no ha funcionado, no fomenta la iniciativa ni la competencia. Es claro que algo debe cambiar y no sólo porque no haya dinero y debamos contentarnos en un "socialismo moderado por falta de recursos". Es el sistema de reparto de lo ajeno el que no va. Deberíamos avanzar por otro camino sin olvido de la solidaridad y sin olvido de esa función distributiva del Estado, pero sin ahogar el motor de la riqueza y del desarrollo que es el emprendedor, no el Gobierno.



frid

No hay comentarios: