Ni la ley contra la obesidad ni la ley contra la violencia doméstica son eficaces. Somos más gordos y más violentos.
Por: Federico Rodríguez
En España el PSOE todo lo soluciona por leyes. Entiende que la verdad se determina por real decreto... pero la realidad es muy distinta y cada vez más distinta. Los cambios se deben a hábitos personales y sociales y para que calen deben de entenderse como buenos.
Y al final entendemos que la violencia es derivada del egoismo, de la marginación, pero en definitiva... de la falta de valores, de virtudes y de frenos morales. La ley puede ir contra la violencia en el aula, en el hogar, en la calle... que si esas personas son educadas sin criterio sobre el bien o el mal.. al menor resquicio ejercerán de violentos. Ermua ha sido un botón de muestra. Menores sin recursos éticos, menores con la "sangre caliente", que es lo normal a esas edades... se disparan hacia escaladas que nos escandalizan... pero es que nos hemos cargado los mandamientos. El no matar de la tabla de la ley ¡no es un precepto religioso! y sus derivadas como el no maltratar son verdades absolutas, basadas en la dignidad del ser humano. Cuando sólo son verdad porque lo dice la ley... la rebeldía juvenil no hace caso. En otro orden de cosas... los adultos ya están formados. Ahí la punición legal es más freno... pero es incompleta si la situación familiar de desarreglo se fomenta, si la crisis familiar siempre acaba en ruptura y nunca en real conciliación. Respecto a los gordos, dice la última encuesta sobre la salud en España (que recoge la Razón), el 15,25 por ciento de la población adulta es obesa y el 37,43 por ciento tiene sobrepeso. Entre los niños y adolescentes de 2 a 17 años, el 9,13 por ciento sufre obesidad y el 18,48 por ciento, sobrepeso. Y en la obesidad... la virtud de la continencia cuenta algo, así como una vida de ejercicio. Vencimientos personales para la dieta. Algunos sí que son capaces de entender esos sacrificios que algunos denominan "culto al cuerpo"... pero más que culto al cuerpo es la obligación de cuidarnos... que curiosamente está relacionada con el quinto mandamiento. Recursos médicos, asistenciales... pero también... recursos morales. frid
No hay comentarios:
Publicar un comentario