El pasado miércoles, la asociación de ex-Concejales democráticos, de la que formo parte, invitó a Don Fernando Zubiri de Salinas, Presidente del Tribunal Superior de Justicia de Aragón (TSJA) a una comida coloquio para disertar sobre la "Justicia y Expo 2008, un reto de modernidad".
Ciertamente el titulo me sorprendió tanto que hice todo un esfuerzo por ir y escuchar si se previa algo especial entre la Justicia y la Expo, pero me tranquilizó la conferencia. No se trataba de airear trapos sucios sino de prevenir las razonables incidencias de una afluencia de más de seis millones de personas en tres meses o algo más a una ciudad española, Zaragoza.
Y es que el señor Zubiri, antes Excelentísimo hasta que los socialistas hicieron una ley para apearnos del tratamiento, es una persona equilibrada y sosegada, que cree en la justicia, en el imperio de la ley y en la conciencia humana como fuente próxima de moralidad. Es por eso que la charla entró en derroteros de normalidad.
La ciudadanía tiene la impresión de que la justicia es un "cachondeo", y realmente se hacen esfuerzos desde el poder político para que así sea, últimamente con el nuevo Ministro de la in-justicia, sectario declarado, acérrimo defensor de las "atrocidades de la guerra civil" y dispuesto a poner en cintura a los jueces, es decir, a hacer que el tercer poder se someta al primero. Pero oyendo al señor Zubiri, creemos que no le va a ser fácil a este ejecutivo, en esta legislatura, avanzar en el camino de enterramiento de las libertades. Y esperemos que, por el bien de España, no tengan una segunda oportunidad.
El señor Zubiri defiende una justicia sometida al imperio de la ley, no del capricho, al servicio del ciudadano. Sostiene que Zaragoza no es una ciudad en exceso conflictiva, la mayoría de los casos se resuelven por vías administrativas y civiles; estamos por debajo de la media nacional en los casos que se plantean por vía penal. Los jueces en Aragón gozan de estabilidad, tienen un alto grado de experiencia y profesionalidad.
Pero, con ocasión de la Expo 2008, el Pleno de la magistratura aragonesa solición el 17 de noviembre, por unanimidad, más medios para atender una ciudad en continua expansión. La Expo 2008 traerá 6 millones de población flotante en tres meses, pero la Plataforma logística, las infraestructuras de Ocio nuevas, el AVE, el aeropuerto y las nuevas urbanizaciones hacen pensar en un rápido crecimiento de nuestra ciudad. Además de más medios, se requieren medidas especiales para el breve plazo de la Expo.
Dejó claro la "independencia judicial" frente al poder político. Su labor es proteger al débil en especial, y el Estado, por supuesto, no es el débil de la película.
Sobre el futuro de la administración de la justicia avanza la profusión de juicios rápidos, la informatización de procesos, la información informática al ciudadano, la protección del ciudadano.
Comenta, ante la frustración de la ciudadanía cuando un maleante es encarcelado y librado casi de seguido, que ellos tienen atadas las manos por la ley. No pueden hacer lo que les gustaría o lo que les parece más justo, l son servidores de la ley. Lo que hay que hacer es cambiar las leyes y adecuarlas a las nuevas realidades. Los presupuestos que rigen la ley del menor, ciertamente defraudan a muchos que ven a los criminales sueltos, pero sin cambiar la ley, si el maleante es menor, se acogerá a esa ley.
En definitiva: leyes justas harán más fácil una justa administración de la justicia. Concluye el ponente.
Y Ministros sectarios nos lo pondrán a todos más difícil, eso concluye el narrador de esta tertulia.
frid
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